En mi paso por ronda (RMR) me llevo a trabajar con José Carlos. Con un humor irónico peculiar en él, yo destacaría su paciencia casi infinita.
Su buen hacer y el apoyo que siempre está brindando en la gente que confía. Durante mis tres años de formación pasé mucho tiempo junto a él. Ya que además de entrenar en la Maestranza, trabajábamos juntos los Potros en sus cuadras privadas. Han sido muchas horas. Muchos viajes y muchas vivencias en las que no podría destacar una negativa. Su trato con los caballos siempre respetuoso y velando por su salud y calidad de vida son cosas que me encantaron de ver en un jinete de su talla.
Yo no creo que fuese un alumno fácil, si algo destaca de mi carácter es mi terquedad pero Jose siempre ha sabido llevarlo. Y en gran parte y siempre agradecido estoy donde estoy gracias a él.